Por fortuna y gracias a la creciente demanda, en la actualidad existen distintas alternativas en cuanto a internados en Tijuana para niños con TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad).
No obstante, al momento de elegir la mejor opción para nuestro hijo o hija, es esencial tener en consideración que el internado cumpla al menos con las siguientes características:
Que el niño cuente con acceso a una educación que sea lo más personalizada y participativa posible.- En sintonía con el punto anterior, la cantidad de alumnos de cada aula del internado debe ser la menor posible
- El hecho de que el profesor cuente con un conocimiento al menos básico de las implicaciones de tener TDAH, hará que sea una persona más flexible para adaptarse a las necesidades del niño con este trastorno. Una formación básica en este aspecto es fundamental para la plantilla de docentes, pues entre mayor conocimiento tengan al respecto, más podrán ayudar al menor.
- El profesor tendría que mantener una relación cercana tanto con el alumno como la familia del mismo, estando dispuesto a colaborar en caso que se le pida elaborar un informe en donde ahonde sobre el comportamiento y el rendimiento, o bien, completar un cuestionario que le llegue a solicitar un médico o pediatra por escrito.
- Siendo la escuela un sitio de aprendizaje tanto académico como social, resulta relevante que el niño se sienta cómodo en todo momento, lo cual incluye contar con amigos con quienes además de compartir clases, pueda jugar y disfrutar de actividades extracurriculares.
- El entorno de los internados en Tijuana adecuados para niños con TDAH, ha de ser uno motivador y que siempre esté buscando fomentar las fortalezas del pequeño, pues seguramente siempre habrá una faceta en la que pueda destacar del resto incrementando con ello su autoestima.
Por último, pero no por ello menos importante, el hecho de que el internado cuente con un equipo de orientación psicopedagógica, o bien un departamento de orientación que pueda realizar valoraciones a los niños con ciertos comportamientos o complicaciones académicas detectadas ya sea por los padres o el profesor, es de gran ayuda.
Así, ésta área en específico podrá efectuar un informe de evaluación psicopedagógica del cual a su vez podrían originarse recomendaciones acerca de intervenciones en el aula como tal, además de si el alumno necesita algún tipo de apoyo educativo.
De igual forma, puede encargarse de hacer un dictamen de escolarización, esto con el fin de establecer qué modalidad de escolarización resulta la más apropiada, así como si se necesita o no una adaptación curricular.
